Daniel Dennett es un filósofo, humanista y científico estadounidense con la gran capacidad de acercar el conocimiento y el pensamiento al gran público. La revista Philosopher's Magazine dijo de él que es uno de "los pocos filósofos contemporáneos capaces de filosofar en público, y de hacerlo bien". Es también uno de los autores ateos que se esfuerzan en la superación de la religión. Al respecto, el mismo Dennett dice: “Creo que mucha gente se aferra a la religión porque piensa que no hay nada que pueda ocupar su lugar”. “No es maravillosa, pero vivir sin ella sería terrible. Bueno, respiremos profundo y veamos qué podría ocupar su lugar. ¿Qué hay que la religión haga realmente bien? ¿Hay otras instituciones que pudieran hacerlo igual de bien, o incluso mejor? Por supuesto, la idea misma de querer sustituir la religión por alguna otra cosa hace que mucha gente sienta temor y odio y consternación. Pero es porque nunca se han puesto a pensar en ello".
Dennett considera que una de las tareas del filósofo es ayudar a formular las mejores preguntas que puedan hacerse, una tarea nada fácil. A menudo, los descubridores de nuevas ideas se atrincheran y desean establecer nuevas verdades. El problema no es que el filósofo se sitúe en las alturas para adoptar un determinado punto de vista, sino que es incapaz de posarse en el suelo y acercar su pensamiento a los demás. Dennett sí posee esa capacidad y hace gala, además, de un inmejorable sentido del humor. En lugar de exponer un argumento formal de manera rigurosa, Dennett trata de sorprender a sus oyentes y tratar de que sonrían y lo pasen bien. El mismo Bertrand Russell dijo una vez que las personas creen, de manera equivocada, que gracioso y serio son antónimos. Dennet solo piensa que gracioso puede ser antónimo de solemne: "Nunca hablo más en serio que cuando me pongo gracioso".
Desde ese punto de vista, su manera de tratar la religión es preguntar qué cosas desea conservar la gente de ella y qué cosas les gustaría que desaparecieran para siempre. Para mucha gente, el término "ateísmo" tiene solo connotaciones negativas, pero las preguntas para Dennett son: ¿a favor de qué estamos?, ¿qué es lo que apoyamos, y qué podríamos hacer al respecto? Es por eso que Dennett, haciendo gala de buen humor, quiso implantar un nuevo término que substituyera al ateísmo: el movimiento bright (aludiendo a un ateísmo vitalista y atractivo, que contradiga esa imagen "gruñona" de algunos ateos). Es un deseo de dar una nueva imagen a la negación de la creencia sobrenatural, que es posible que no gane demasiados adeptos, pero que demuestra que, efectivamente, Dennett puede hablar perfectamente en serio y ser chistoso.
Por otra parte, Dennett se ha esforzado también en explorar en el asunto de la conciencia. En sus libros y artículos, ha indagado en todo lo referente a las explicaciones evolutivas hasta la sicología de la conducta, de la inteligencia artificial y la computación hasta la estética y la crítica del arte. Tal y como dice: "Ahí es donde tengo el corazón, en ayudar a la gente a ver cómo funciona la mente".
Romper el hechizo, obra de Daniel Dennett para descargar en PDF.
Entrevista a Daniel Dennett en el semanario alemán Der Spiegel.
La conciencia sin misterios, obra de Daniel Dennett para descargar en PDF.
Dennett considera que una de las tareas del filósofo es ayudar a formular las mejores preguntas que puedan hacerse, una tarea nada fácil. A menudo, los descubridores de nuevas ideas se atrincheran y desean establecer nuevas verdades. El problema no es que el filósofo se sitúe en las alturas para adoptar un determinado punto de vista, sino que es incapaz de posarse en el suelo y acercar su pensamiento a los demás. Dennett sí posee esa capacidad y hace gala, además, de un inmejorable sentido del humor. En lugar de exponer un argumento formal de manera rigurosa, Dennett trata de sorprender a sus oyentes y tratar de que sonrían y lo pasen bien. El mismo Bertrand Russell dijo una vez que las personas creen, de manera equivocada, que gracioso y serio son antónimos. Dennet solo piensa que gracioso puede ser antónimo de solemne: "Nunca hablo más en serio que cuando me pongo gracioso".
Desde ese punto de vista, su manera de tratar la religión es preguntar qué cosas desea conservar la gente de ella y qué cosas les gustaría que desaparecieran para siempre. Para mucha gente, el término "ateísmo" tiene solo connotaciones negativas, pero las preguntas para Dennett son: ¿a favor de qué estamos?, ¿qué es lo que apoyamos, y qué podríamos hacer al respecto? Es por eso que Dennett, haciendo gala de buen humor, quiso implantar un nuevo término que substituyera al ateísmo: el movimiento bright (aludiendo a un ateísmo vitalista y atractivo, que contradiga esa imagen "gruñona" de algunos ateos). Es un deseo de dar una nueva imagen a la negación de la creencia sobrenatural, que es posible que no gane demasiados adeptos, pero que demuestra que, efectivamente, Dennett puede hablar perfectamente en serio y ser chistoso.
Por otra parte, Dennett se ha esforzado también en explorar en el asunto de la conciencia. En sus libros y artículos, ha indagado en todo lo referente a las explicaciones evolutivas hasta la sicología de la conducta, de la inteligencia artificial y la computación hasta la estética y la crítica del arte. Tal y como dice: "Ahí es donde tengo el corazón, en ayudar a la gente a ver cómo funciona la mente".
Romper el hechizo, obra de Daniel Dennett para descargar en PDF.
Entrevista a Daniel Dennett en el semanario alemán Der Spiegel.
La conciencia sin misterios, obra de Daniel Dennett para descargar en PDF.
1 comentario:
Daniel Dennett, que forma parte, junto a Sam Harris, Richard Dawkins y Christopher Hitchens, del grupo denominado "los cuatro jinetes de la Apocalípsis". Todos ellos mentes lúcidas.
Es curioso, los ateos surgidos en el seno de sociedades protestantes desarrollan estrategias distintas a los provenientes del catolicismo.
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