Pues eso, que he comprado hoy el diario "Público" (¡Jo, y regalan "Los lunes al sol", todo por 50 céntimos! ¡Son progres, progres!) y me he encontrado con un artículo de Javier Sádaba donde, supuestamente, se reivindican las ideas libertarias.
Naturalmente, pues menudo soy yo, les he mandado ya una cartita:
"Por un lado, me es muy grato leer un artículo como el de Javier Sádaba en el que se haca una defensa, de manera más o menos clara, de manera más o menos implícita, de las ideas libertarias (léase anarquismo, término que no habría que temer utilizar). Lo que me resulta más chocante (e interpreto como una triste concesión del autor a lo "políticamente correcto") es lo de "No se trata tampoco de resucitar viejas siglas o modos de actuar que perdieron interés por su atrincheramiento y falta de contacto con resto de la sociedad." Sería necesario especificar esos "modos de actuar" afines al anarquismo (y estoy seguro que serán muy minoritarios en la Historia) y, en cuanto a las siglas, decir que la CNT y la FAI siguen vivitas y coleando, con mucha actividad y con mucha propaganda. Si sus métodos de siempre son hoy los adecuados ya forma parte de otro debate (y más complejo de lo que parece). Lo que es triste es que se ningunee o desprecie a unas siglas obreras y libertarias de gran militancia en la historia de España, las cuales sufrieron una auténtica limpieza ideológica en un país donde, degraciadamente y sin que haya todavía una condena unánime, triunfó el fascismo. Atribuir su situación actual a falta de conexión con la gente o a modos de actuar inadecuados me parece no ya reduccionista, sino una falsedad histórica. La historia del anarquismo está construida en gran medida por sus propios militantes (en una esforzada e impagable labor), siempre de manera abierta y autocrítica. La publicación "Germinal. Revista de estudios libertarios", nacida en 2006 y de de cuyo comité de redacción formo parte, recoge también el interés académico que suscitan unas apasionantes ideas (las cuales, algunos pretendemos que sigan presentes con fuerza en nuestra sociedad). Por otra parte, enhorabuena por la aparición de su diario y espero que suponga un oasis de pluralidad y libertad de expresión en un triste panorama."
Naturalmente, pues menudo soy yo, les he mandado ya una cartita:
"Por un lado, me es muy grato leer un artículo como el de Javier Sádaba en el que se haca una defensa, de manera más o menos clara, de manera más o menos implícita, de las ideas libertarias (léase anarquismo, término que no habría que temer utilizar). Lo que me resulta más chocante (e interpreto como una triste concesión del autor a lo "políticamente correcto") es lo de "No se trata tampoco de resucitar viejas siglas o modos de actuar que perdieron interés por su atrincheramiento y falta de contacto con resto de la sociedad." Sería necesario especificar esos "modos de actuar" afines al anarquismo (y estoy seguro que serán muy minoritarios en la Historia) y, en cuanto a las siglas, decir que la CNT y la FAI siguen vivitas y coleando, con mucha actividad y con mucha propaganda. Si sus métodos de siempre son hoy los adecuados ya forma parte de otro debate (y más complejo de lo que parece). Lo que es triste es que se ningunee o desprecie a unas siglas obreras y libertarias de gran militancia en la historia de España, las cuales sufrieron una auténtica limpieza ideológica en un país donde, degraciadamente y sin que haya todavía una condena unánime, triunfó el fascismo. Atribuir su situación actual a falta de conexión con la gente o a modos de actuar inadecuados me parece no ya reduccionista, sino una falsedad histórica. La historia del anarquismo está construida en gran medida por sus propios militantes (en una esforzada e impagable labor), siempre de manera abierta y autocrítica. La publicación "Germinal. Revista de estudios libertarios", nacida en 2006 y de de cuyo comité de redacción formo parte, recoge también el interés académico que suscitan unas apasionantes ideas (las cuales, algunos pretendemos que sigan presentes con fuerza en nuestra sociedad). Por otra parte, enhorabuena por la aparición de su diario y espero que suponga un oasis de pluralidad y libertad de expresión en un triste panorama."
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